Nuestra estancia fue relajante, nos han gustado sus desayunos calientes y muy buenos.

De verdad que lo aconsejamos, no he tenido ningún inconveniente, nos sentimos muy especiales. Tenía una ubicación estupenda, a un corto paseo de los Deux-Rives Garden. Situado a 10 minutos a pie de la parada del autobús.

Todo muy limpio y el desayuno es abundante. Habitaciones de buen tamaño, con grandes ventanas, y personal bueno. Ubicación ideal y perfecta, cercana a la parada del tranvía. Se puede llegar rápidamente a los Deux-Rives Garden, que está a solo 1 km.

La cama era bastante buena, el baño ideal y había una caja fuerte personal, una nevera y una mesa de trabajo en la habitación. Ubicación: el hotel estaba muy cerca del centro de la ciudad, del tranvía, de la parada del tranvía. Nos pasamos por Cafe Dreher para tomar un café y unos postres, está cerca del lugar, lo recomiendo.

Buena opción para alojarse en Kehl. El hotel cuenta con una ubicación conveniente, cerca de la estación de tren y del centro de la ciudad. Las habitaciones son cómodas y limpias, y el desayuno es completo y satisfactorio. Aunque hubo un inconveniente con el check-in, este fue resuelto rápidamente por el personal del hotel. Recomiendo llegar fuera del horario de mediodía para evitar dificultades. Un detalle negativo es que en invierno hace frío en las habitaciones. En general, es una buena opción para hospedarse en la ciudad.

El desayuno es caliente y muy bueno, con una enorme variedad de comida. La ubicación no está muy lejos del tranvía y de la estación de tren, también cerca de la parada de tranvía.

Habitaciones ordenadas y con grandes ventanas. Ubicación perfecta y excelente cerca de la estación de tren y del centro de la ciudad. Acceso fácil a las principales atracciones. Cerca del mercado, restaurantes y del centro de la ciudad.

Limpieza impecable y habitación espaciosa. Cerca de la estación de trenes y del centro de la ciudad.- El minibar en la habitación fue un buen detalle.- La recepcionista fue muy amable y nos evitó pagar de más en el check out.

No dudaría en recomendar este hotel.

La última vez que nos alojamos aquí nos dieron una habitación lo suficientemente espaciosa y enorme con una buena cocina americana. Había una ducha y un secador de pelo. La ubicación del hotel era tranquila y cómoda cercana a la estación de tren y al centro de la ciudad, había centros comerciales y un mercado a poca distancia. Además, el hotel estaba situado a un corto paseo del Puente de Europa.

Las habitaciones eran cómodas y limpias, lo cual nos permitió disfrutar de nuestro fin de semana en el hotel. Además, la ubicación del hotel era inmejorable, ya que se encontraba en el centro de la ciudad pero en una calle tranquila. Otro aspecto positivo fue el desayuno completo que ofrecían, lo cual nos permitió empezar el día con energía.

Tuvimos algunos inconvenientes durante nuestra estadía en el hotel. A nuestra llegada, no había personal en recepción y tuvimos que esperar para que nos abrieran la puerta de ingreso.

Nuestra estancia en Kehl fue increíble! Fuimos a dar un paseo por el paseo marítimo y ¡las vistas eran alucinantes! Luego nos dirigimos al centro de la ciudad y estaba repleto de lugares geniales para pasar un buen rato. La habitación en el hotel era perfecta para nosotros, amplia y con todo lo que necesitábamos. Definitivamente, volveríamos.

Lo único que nos faltó fue un poco más de vida nocturna en la ciudad. Nos hubiera encantado encontrar más bares y discotecas para salir por la noche y disfrutar de la fiesta.

Hemos tenido unos días increíbles en este hotel asequible. El personal fue genial y muy amigable, gracias a ellos todo salió estupendo. El desayuno era delicioso, la habitación amplia, con grandes ventanas. Nos encantó nuestra estancia, lo recomendaría a todos.

Es nuevo, moderno y cómodo. Cerca del centro. Ambiente agradable. Personal amable y servicial.

No hay nada negativo.

Está situado en una zona segura y cerca de la estación de tren y el centro de la ciudad. Las habitaciones son espaciosas y cuentan con grandes ventanales y una cocina americana. El desayuno es abundante y tiene una buena variedad de comida.

El checkin fue súper fácil y moderno, ¡utilizando una máquina! La habitación era amplia y cómoda, con una mini cocina y minibar. La ubicación era genial, con una parada de tranvía justo enfrente que te llevaba a todas partes en solo 30 minutos. Además, la recepcionista fue muy amable y nos ayudó a evitar pagar de más.

Limpieza de primer nivel - Nuestra habitación en este hotel fue impecablemente limpia, ¡incluso más brillante que el sol de la mañana en el río! ¡Me sentí como si estuviera en una escena de "Blancanieves y los siete enanitos" donde los animales limpian la casa!

Cobro extra inesperado - El personal de recepción trató de cobrarnos un suplemento sorpresa por la limpieza de la cocina.